¿Qué impuestos están obligadas a pagar las empresas?

Desde nuestra asesoría jurídica, queremos hablar en este post sobre una de las dudas más frecuentes que tienen nuestros clientes. Se trata de los impuestos a los que están obligadas a pagar las empresas. Existe un gran desconocimiento al respecto, y creemos que es muy importante conocer cuáles son los impuestos más importantes a los que toda compañía debe hacer frente en España.

Impuestos que deben pagar las empresas

  • Impuesto sobre Sociedades: es aquel que se aplica a los beneficios que obtienen las empresas, tanto las sociedades mercantiles, como otras entidades jurídicas. La declaración de este impuesto es obligatoria, incluso aunque no se haya desarrollado ningún tipo de actividad u obtenido rentas durante el periodo impositivo. El tipo impositivo no es el mismo en todas las comunidades autónomas. En Navarra y País Vasco es del 28%, mientras que en el resto del país es del 25%.
  • Impuesto sobre actividades económicas: están obligadas a pagarlo las personas físicas, autónomas, sociedades y entidades sin personalidad jurídica. Hay cuatro tipos de declaración: la de alta, que empieza cuando se inicia una actividad económica; la de variación, que se da cuando hay cambios en la actividad; la de baja, cuando cesa la actividad; y la de comunicación del importe neto de la cifra de negocios.
  • Impuesto sobre el Valor Añadido: impuesto indirecto que grava sobre el consumo de los bienes y servicios de las empresas. Se aplica sobre las entregas de bienes y prestaciones de servicios por parte de la empresa en el desarrollo de su actividad, sobre las adquisiciones intracomunitarias de bienes, y sobre las importaciones de bienes.
  • Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas: las empresas deben retener una parte de la nómina a sus empleados y a los proveedores que sean autónomos, en concepto de IRPF. En concreto, la compañía se queda con una parte del salario de sus empleados y hace el pago en su nombre (pago a cuenta) cada tres meses.

Además de estos impuestos, que, como creemos en Bazán Abogados son quizás los más importantes a tener en cuenta, también puede ser obligatorio pagar otros en función de las circunstancias concretas, como por ejemplo, aduanas o impuestos especiales de gestión estatal; impuestos en la comunidad autónoma en la que se encuentra la empresa, como el impuesto de sucesiones y donaciones, el impuesto sobre transmisión y actos jurídicos documentados, o impuestos especiales de gestión autonómicas; también impuestos locales, como el impuesto sobre bienes inmuebles, el impuesto sobre construcciones y obras, etc.

Lo mejor para no cometer errores, es acudir a una asesoría jurídica y contable como la nuestra que pueda ayudar al negocio a tener todo lo relacionado con impuestos en orden.